Tres vagabundos sobreviven refugiados en un cajero automático. Un inocente intercambio de colillas de cigarros les llevará a descubrir que si sabes jugar conforme a las reglas adecuadas, se puede crear un imperio financiero de proporciones dantescas. Bienestópolis es una metáfora en clave de humor que, que pasa por los grandes hitos de la historia económica, planteando de forma lúdica la profunda contradicción existente en nuestro sistema monetario.